
EL DESCONOCIDO MUNDO DE LOS HONGOS: MÁS ALLÁ DEL MOHO Y LOS CHAMPIÑONES


Por: Dra. Carolina Chegwin
Química, MSci y PhD en Ciencias Químicas
Cuando pensamos en los hongos, probablemente se nos vienen a la mente esas manchas verdosas o negras que aparecen sobre alimentos olvidados fuera de la nevera, o en prendas guardadas en lugares húmedos. Al tocarlos, muchas veces se desprenden unas partículas finas, casi como polvo. Esa es una de las formas más comunes —y menos agradables— en las que solemos conocerlos.
Pero los hongos son mucho más que eso.
Hongos en nuestra vida diaria (aunque no lo sepamos)
Algunas personas piensan en quesos madurados, en la levadura que fermenta el pan y la cerveza, o en el origen de la penicilina, ese antibiótico revolucionario que fue aislado de un hongo llamado Penicillium. Otros quizás recuerden los anuncios sobre onicomicosis, ese trastorno que afecta las uñas y que también es causado por hongos, pero esta vez desde una perspectiva dermatológica.
Sin embargo, cuando hablamos de hongos como alimento, en muchos países de América Latina —incluyendo el nuestro— solemos pensar solo en el champiñón. Lo usamos en salsas, pizzas o ensaladas, y ahí se detiene nuestro conocimiento culinario sobre ellos.
Los hongos en la cultura pop y nuestra infancia
Si creciste en los años 80, seguro recuerdas los hongos de los gnomos, los paisajes de la aldea de los pitufos, o a los legendarios aliados de Mario y Luigi Bros. que les otorgaban súper poderes. Hoy en día, los niños tienen aún más contacto visual con los hongos en películas animadas, series y videojuegos.
Mi sobrino de 7 años, por ejemplo, se emociona cada vez que ve uno en la pantalla. Intenta adivinar su género, me pregunta cómo se llama y para qué sirve. ¡Y eso me llena de esperanza!
¿Por qué sabemos tan poco sobre los hongos?
Todo esto nos muestra que los hongos están en todas partes, pero seguimos sin entender su verdadero valor. A lo largo del tiempo, la atención se ha centrado en otros grupos de seres vivos: la fauna y la flora. Pero, ¿qué pasa con la funga?
Incluso en la educación escolar, los hongos han estado relegados a un segundo plano. ¿Recuerdas aprender sobre ellos en las clases de biología? Seguramente te hablaron de los animales, las plantas, las pirámides alimentarias que incluyen carne, leche, huevos y legumbres… pero no de los hongos como alimento, a pesar de su alto contenido nutricional y su aporte de proteínas, que en muchos casos superan a algunos cereales y leguminosas.
¿Dónde encajan los hongos en la naturaleza?
Otra pregunta interesante: ¿a dónde clasificamos a los hongos en las pirámides tróficas o ecológicas? No son carnívoros, ni herbívoros, ni omnívoros. Los hongos ocupan un lugar crucial: la base de la pirámide, como degradadores naturales. Son los ingenieros sanitarios del planeta, ya que descomponen la materia para que otros seres puedan nutrirse.
El futuro de los hongos: alimentación, salud y bienestar
Hoy en día, conceptos como el hongo de la longevidad (Ganoderma lucidum), el melena de león (Hericium erinaceus), o incluso el temido hongo de la serie de Netflix The Last of Us han despertado el interés de muchas personas.
Y cuando viajamos o visitamos supermercados en Europa, Asia o incluso otros países latinoamericanos, vemos una amplia variedad de hongos comestibles y funcionales disponibles. ¿Por qué no sucede lo mismo en nuestro país? ¿Qué nos estamos perdiendo?
¡Bienvenidos a un nuevo universo!
A partir de hoy, quiero invitarte a explorar conmigo el desconocido mundo de los hongos. Te hablaré de sus aplicaciones, beneficios para la salud, su valor en la gastronomía, y cómo pueden transformar desde nuestra alimentación hasta el cuidado del planeta.
Este es solo el comienzo.